La natación es uno de los deportes más completos y beneficiosos para la salud, pero también puede provocar algunas lesiones si no se practica correctamente o se abusa de su intensidad. En este artículo te vamos a explicar cuáles son las 4 lesiones comunes de natación, cómo prevenirlas y cómo tratarlas en caso de que se produzcan.
1. Lesiones del manguito rotador: El manguito rotador es el conjunto de músculos y tendones que rodean la articulación del hombro y le permiten realizar movimientos circulares. Los nadadores suelen sufrir inflamación o desgarro de estos tejidos debido a la repetición constante de los brazos sobre la cabeza. Los síntomas son dolor, rigidez y pérdida de movilidad en el hombro.
Prevención: Para evitar esta lesión es importante calentar bien antes de nadar, realizar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento del hombro, variar los estilos de natación y no sobrecargar el entrenamiento.
Tratamiento: Si se produce una lesión del manguito rotador, lo primero que hay que hacer es aplicar hielo en la zona afectada, tomar antiinflamatorios y reposar el brazo. En casos más graves puede ser necesario recurrir a la fisioterapia o a la cirugía.
2. Dolor de espalda baja: La espalda baja es otra zona que puede sufrir por la natación, especialmente por el estilo mariposa, que implica un arqueo excesivo de la columna vertebral. Esto puede provocar contracturas, pinzamientos o hernias discales que se manifiestan con dolor, inflamación y limitación del movimiento.
Prevención: Para prevenir el dolor de espalda baja es fundamental mantener una buena postura al nadar, evitar los movimientos bruscos y cuidar la técnica. También se recomienda fortalecer los músculos abdominales y lumbares con ejercicios específicos y estirar bien después de cada sesión.
Tratamiento: Si se produce un dolor de espalda baja por la natación, lo más conveniente es aplicar calor en la zona, tomar analgésicos y relajar los músculos con masajes o estiramientos suaves. En casos más severos puede ser necesario consultar con un médico o un fisioterapeuta.
3. Rodilla del nadador: La rodilla del nadador es una inflamación del cartílago que recubre la articulación de la rodilla, llamado menisco. Se produce principalmente por el estilo de pecho, que implica una rotación interna de las caderas y una flexión exagerada de las rodillas. Los síntomas son dolor, hinchazón y dificultad para doblar o estirar la pierna.
Prevención: Para prevenir esta lesión es aconsejable calentar bien las piernas antes de nadar, mejorar la técnica de patada, alternar los estilos de natación y no forzar las articulaciones con movimientos bruscos o excesivos.
Tratamiento: Si se produce una lesión del menisco por la natación, lo más indicado es aplicar hielo en la rodilla, tomar antiinflamatorios y reposar la pierna. En casos más complicados puede ser necesario recurrir a la fisioterapia o a la cirugía.
4. Lesiones del cuello: El cuello es otra parte del cuerpo que puede sufrir por la natación, sobre todo por el estilo crol, que implica una rotación constante de la cabeza para respirar. Esto puede causar tensión, contracturas o esguinces en los músculos y ligamentos del cuello, que se traducen en dolor, rigidez y limitación del movimiento.
Prevención: Para prevenir las lesiones del cuello es importante mantener una buena alineación de la cabeza con el cuerpo al nadar, respirar de forma alternativa a ambos lados y no levantar demasiado la cabeza al salir del agua. También se aconseja realizar ejercicios de movilidad y estiramiento del cuello antes y después de cada sesión.
Tratamiento: Si se produce una lesión del cuello por la natación, lo más recomendable es aplicar calor en la zona, tomar analgésicos y relajar los músculos con masajes o estiramientos suaves. En casos más serios puede ser necesario consultar con un médico o un fisioterapeuta.
Esperamos que este artículo te haya sido útil para conocer las 4 lesiones comunes de natación, cómo prevenirlas y cómo tratarlas. Recuerda que la natación es un deporte muy saludable, pero que requiere de una buena técnica, un entrenamiento adecuado y un cuidado de las articulaciones y los músculos. Si tienes alguna duda o consulta, no dudes en contactar con nosotros en Aquara Kids, tu escuela de natación de confianza.
